Lo que partió siendo una respuesta frente a la suspensión de todas sus actividades debido a la pandemia del Coronavirus, se transformó en un desafío para el Centro Cultural. El equipo tiene hoy los ojos puestos en experimentar nuevas metodologías y formatos que se adapten a la entrega virtual de algunos de sus contenidos, para no perder el contacto con la comunidad.
Así nació el Aula Virtual, plataforma implementada por el área de Formación Artística de la institución, con el objetivo de no detener los procesos de enseñanza, manteniendo activos sus talleres anuales y semestrales, elencos y otras actividades que se vieron afectadas por la emergencia sanitaria que ha provocado la actual crisis sanitaria.
Verónica Palomino, directora del CCSA, comenta que “esta herramienta permitió poner en marcha nuestros talleres en un espacio en que los talleristas pueden compartir contenidos, videos y otros recursos educativos con alumnos y alumnas. No queríamos interrumpir el proceso de enseñanza-aprendizaje que, además, es una forma de mantenerse activos en casa durante la cuarentena”.
La plataforma está activa desde abril y pueden acceder a ella quienes fueron seleccionados en los talleres anuales y semestrales. A través de su correo electrónico, reciben la invitación para ingresar, asignando usuario y contraseña, por lo que es imprescindible contar con cualquier dispositivo electrónico con acceso a internet.
Marcha blanca
En sus primeros días los resultados son satisfactorios, señalan desde el Centro Cultural. Camila Lampert, encargada de Formación Artística, indica que se ha “logrado incorporar a la mayoría de los talleres y elencos, y profesores y alumnos se familiarizado con la plataforma. Estamos, también, intentando llegar a quienes no tiene cómo conectarse, es una realidad que no podemos ignorar”.
El Aula Virtual trabaja con Moodle, conocido sistema de enseñanza e-learning que permite gran variedad de acciones. Los profesores pueden subir videos, generar foros y chats, compartir archivos; en tanto que los alumnos pueden revisar la programación de clases, enviar tareas y recibir retroalimentación, acceder al material compartido, entre otras posibilidades.
Camila Lampert agrega que “la recepción ha sido muy buena, muchos han manifestado que esta instancia es muy significativa para ellos, porque los ha ayudado a desconectarse un poco del contexto en que estamos y a conectarse con el arte. Para los profesores implica utilizar nuevas herramientas de enseñanza a distancia, y todos han sido muy creativos en este desafío”.